Será obligatorio el chip y registro de los gatos. La ministra de Agricultura, Naturaleza y Calidad Alimentaria quiere utilizar este método para reunir más rápidamente a los gatos perdidos con sus dueños. También debería ser más fácil tratar con gatos callejeros sin dueño.
El requisito del chip se aplicará en cualquier caso a los gatos domésticos. Todavía se está investigando si los gatos callejeros también deberían incluirse. Según el ministerio, hay alrededor de 2,9 millones de gatos domésticos en los Países Bajos y las estimaciones sobre la cantidad de gatos callejeros varían ampliamente. Cada año se denuncia la desaparición de unos 60.000 gatos.
Según la ministra neerlandesa Adema, el cuidado de la gran cantidad de gatos cuyos dueños no se pueden rastrear cuesta a los municipios unos cinco millones de euros al año. Según el ministro, los gatos callejeros y los gatos sueltos también pueden causar molestias, causar problemas y propagar enfermedades. Un microchip obligatorio debería hacer que sea más fácil responsabilizar a los propietarios por su responsabilidad de cuidar al animal.
Si bien ya se han realizado consultas entre el ministro y los municipios, provincias y diversos organismos, aún no se ha fijado una fecha en la que la exigencia del chip debe convertirse en un hecho en los Países Bajos. Ya se han realizado pruebas para permitir que los municipios determinen por sí mismos si se aplica un requisito de chip, pero resultó que solo un requisito nacional ayudará.
De momento hay municipios neerlandeses en los que los dueños de gatos pueden llevar chip a su gato de forma voluntaria. Ha habido un requisito nacional de microchip para perros durante años.
Según Protección Animal (Dierenbescherming), más gatos podrán ser devueltos a sus dueños con el chip obligatorio. De todos los gatos desaparecidos que ahora terminan en refugios, el 17 % puede reunirse con sus dueños. El resto de gatos no tienen chip o un chip no está debidamente registrado. A modo de comparación: para los perros esto es nada menos que el 93 %, lo que demuestra que el microchip es realmente efectivo, según Dierenbescherming.